Las mafias en las cárceles, donde se mueven millones cada día, tienen cada vez más poder. Organizan motines y asesinatos para poder mantener las estructuras de control absoluto dentro de los penales. Hasta ahora, las autoridades del Ministerio de Justicia no lograron desarticular los grupos de poder que operan en los penales. La actual ministra, Cecilia Pérez, viene trabajando desde setiembre de 2016 en la cartera, primero como Viceministra de Política Criminal en el Gobierno de Horacio Cartes, encargada del diseñar la política criminal y penitenciaria, este mismo cargo le confió Mario Abdo; luego ya fue designada titular de la institución. Los logros de su gestión están a la vista.
La ministra Cecilia Pérez es la que más empapada está en la problemática de los penales, pues hace ya casi 5 años está directamente relacionada a las políticas penitenciarias. Lo que llama la atención es que, pese a estar en un lugar de decisión ya desde el Gobierno de Horacio Cartes, el manejo de las mafias en las cárceles creció considerablemente.
Hoy, los grupos de poder dentro de los penales deciden casi todo a fuerza de coimas, chantaje y violencia. Los motines están al orden del día para eliminar a los enemigos de estos clanes, tal como se vio el martes en Tacumbú.
Las estructuras que manejan las cárceles incluso tienen en sus bolsillos a los funcionarios que trabajan en los establecimientos penitenciarios, encargados de recaudar también para las autoridades de la cartera y fuera del ministerio.
La encargada de identificar y remover a los empleados corruptos es justamente la que está hace años como responsable de la cartera de Justicia: Cecilia Pérez. También debería ya a estas alturas poder identificar a los cabecillas de los grupos que manejan los penales y ver que hacer con ellos.
Si bien, para la opinión pública la ministra Pérez tiene un buen perfil para el cargo, gracias al apoyo de los medios de comunicación (sobre todo los del Grupo Cartes y Grupo Zuccolillo), pocos conocen el fruto de su trabajo desde ya hace 5 años en la cartera y cuyos resultados están a la vista.
Solo en el último episodio, el de Tacumbú, fallecieron 7 internos y fueron heridos varios otros, además del riesgo que significó para bomberos, guardiacárceles y policías. Pese al saldo mortal, la «prensa amiga» calificó de exitoso el manejo de la crisis por parte de la titular del Ministerio de Justicia. Otro caso bajo la administración de Pérez y que marcó historia es la fuga masiva de reos del Penal de Pedro Juan Caballero, que se registró en la madrugada del 19 de enero de 2020. En esa oportunidad, 76 miembros de la facción criminal Primer Comando da Capital PCC lograron escapar por un túnel, poco o nada se sabe del caso.