Después de Dar Essalam (ciudad sede del gobierno de Tanzania), le tocó el turno a Kinsacha (capital de Rep. Democrática del Congo) donde muchos políticos e intelectuales han subrayado la toma de conciencia de la mayoría de los países del continente africano de la realidad del grupo separatista el polisario como un factor de desestabilización de la región y un obstáculo para la integración económica de África. Todo esto generó una ola de llamamientos a la expulsión de esta entidad no estatal de la Unión Africana (UA).


Unión Africana: La africanidad de Marruecos ya no está por demostrarLos participantes en el seminario organizado en la capital de la República Democrática del Congo, bajo el lema «La Unión Africana a la luz de la cuestión del Sáhara: cómo pasar de un fracaso dinámico a una solución definitiva al servicio de la unidad africana», recordaron que la expulsión del polisario fue manifestada en la moción firmada en Kigali (capital de Ruanda) en 2016, por 28 estados miembros de la UA convencidos que esta expulsión ayudara a poner fin a un conflicto artificial creado y perpetuado por Argelia con el único propósito de debilitar a Marruecos.

Contrariamente a ello, Marruecos siempre se ha mostrado dispuesto a encontrar una solución pacífica, como lo demuestra su iniciativa de autonomía para la región del Sahara. Dicha iniciativa, calificada por las Naciones Unidas de seria y cedible, constituye la única vía para una solución política pragmática y justa.

Marruecos vuelve a la Unión Africana entre interrogantes - Elcano Blog
El rey de Marruecos Mohamed VI en una de las cumbre de la Unión Africana.

La credibilidad, el carácter serio de la propuesta de autonomía, el desarrollo económico y social que han hecho del Sahara un centro económico regional y motor de desarrollo para la región sahelo-sahariana, así como la participación masiva de la población local en los diferentes comicios, hicieron que la gran mayoría de los países africanos apoya la soberanía de marruecos sobre el Sahara al igual que Estados Unidos de América. 

El apoyo a la integridad marroquí se plasma, principalmente, en la apertura de cerca de 22 de representaciones diplomáticas en el Sahara.