Además de los millonarios gastos diarios, los afectados se sienten atemorizados para denunciar las irregularidades por miedo a represalias contra sus pacientes en cama.
Los gastos de bolsillo como los denominó el titular del Ministerio de Salud Pública (MSPBS), doctor Julio Mazzoleni, rondan los G. 2.000.000 por día por paciente en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), según pudo constatar ABC en un recorrido realizado ayer por los principales centros hospitalarios de referencia. Además de la falta recurrente de atracurio y midazolam, los familiares de pacientes con covid-19 internados en terapia intensiva deben hacerse cargo de la compra de otros fármacos como losartán para la presión arterial, omeprazol para la acidez estomacal, nitroglicerina para relajar los vasos sanguíneos, furosemida para tratar el edema y heparina empleado como anticoagulante.
Aunque los afectados se mostraron molestos y cansados de estos gastos, admitieron que lo único que pueden hacer es buscar la forma de adquirir estos medicamentos sea del modo que sea, ya que lo que está en riesgo es la salud del paciente en cama. Durante nuestro recorrido, todos aseguraron realizar un gasto diario aproximado a los G. 2.000.000 pero ninguno se animó a ser fotografiado o brindar su nombre por temor. “No podemos hablar mucho pero acá todo es para ya, hay que conseguir como sea. Muchos ya tenemos una existencia de atracurio y otros medicamentos, pero no todos pueden adquirir con anticipación, pero entre todos nos ayudamos”, explicó una mujer, quien tiene a su marido hace 13 días en el Ineram.
Otra persona, una mujer que se encuentra “acampanando” bajo los árboles de Ineram desde hace 20 días, sostuvo que por día como mínimo se les solicitan 10 a 20 ampollas de atracurio y que el costo del fármaco varía mucho. “A veces conseguís por G. 50.000 y otras veces ya tuve que pagar hasta G. 105.000”, dijo.
La situación en IPS Ingavi es muy similar ya que según relataron los familiares de pacientes en terapia, a veces incluso se les solicitan entre 35 y 40 ampollas de atracurio por día. “Es una enfermedad muy cara. Nos vemos obligados a comprar desde agua destilada hasta medicamentos costosos como la heparina, que cada caja de dos ampollas cuesta G. 120.000”, contó una mujer.